Guía de Compra: Como elegir la silla de trabajo adecuada para el taller

Guía de Compra: Como elegir la silla de trabajo adecuada para el taller
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Una buena silla de taller es sinónimo de comodidad y eficiencia en el trabajo. Pero no siempre es fácil elegir el modelo adecuado. Siéntese y escuche nuestros consejos y explicaciones.

La elección de una silla puede resultar una auténtica pesadilla, debido a los innumerables factores que debemos tener en cuenta y que, a veces, parecen contradictorios. Queremos una silla robusta pero cómoda, adaptada pero que pueda ser utilizada por varias personas, estable para permitir gestos precisos pero propicia a los movimientos, para no provocar trastornos musculoesqueléticos… Exigencias que son un verdadero rompecabezas para los fabricantes, que se esfuerzan por innovar y desarrollar unas especificaciones técnicas para proponernos sillas y taburetes cada vez más eficaces. ¿Cómo elegir ante una oferta tan diversificada? Siéntese; se lo explicamos.

Altura del asiento

Más que un criterio de selección, la altura del asiento es probablemente el primer factor a tener en cuenta. En realidad, cuando se trata de asientos, el tamaño es importante. Un taburete alto con posición sentado/de pie es simplemente un producto diferente de una silla de laboratorio o de un taburete de montaje. Cada tipo de asiento está diseñado de manera diferente y un uso no adaptado causará inevitablemente incomodidad al operador y un desgaste prematuro.

Algunos aspectos a considerar antes de comprar una silla:

  • ¿A qué altura se encuentra la superficie de trabajo?
  • ¿Esta altura es variable (banco de trabajo ajustable, varias zonas de trabajo diferentes)?
  • ¿La silla será utilizada por varias personas?

Ergonomía

Desde el taburete de madera anatómico hasta la silla ergonómica con múltiples posibilidades de ajuste, encontramos los más variados niveles de comodidad y ergonomía en el mundo de las sillas de trabajo para el taller. Por lo tanto, es necesario encontrar un compromiso entre su presupuesto y las necesidades objetivas del puesto de trabajo.

Le ofrecemos algunos criterios objetivos:

  • ¿Necesitamos una silla con respaldo? En caso afirmativo, ¿con qué altura? Tenga en cuenta que una silla debe soportar el peso del cuerpo sin restringir sus movimientos.
  • ¿La silla debe girar? Si es así, ¿debe girar toda la silla o solo el asiento? ¿Con qué amplitud?
  • ¿La silla será utilizada por varios operadores? En caso afirmativo, debe disponer de múltiples ajustes (y posiciones).
  • ¿El operador trabaja sentado permanentemente? En caso afirmativo, la silla debe ser ajustable y acolchada. Un ajuste lumbar también es bienvenido.
  • Si la superficie de trabajo está elevada, la presencia de reposapiés será muy útil cuando se trabaje sentado durante períodos prolongados (más de 15 minutos). Un reposapiés regulable en altura será de gran valor.
  • ¿La silla debe tener ruedas? Sí. Son siempre útiles para las carreras de sillas durante los descansos. Bromas aparte, tenga en cuenta que existen ruedas de seguridad con dos modos de funcionamiento:
    – Autobloqueo en vacío: la silla se bloquea por debajo de un cierto peso.
    – Autobloqueo en carga: la silla se desbloquea por debajo de un cierto peso, garantizando así la estabilidad durante el trabajo.

Sillas ergonómicas: ¿qué necesitamos ajustar?

  • Altura del asiento: para una superficie de trabajo con altura estándar, en posición de pie delante de la silla, el borde de la superficie del asiento debe estar al nivel justo por debajo de las rodillas.
  • Profundidad del asiento: cuando esté sentado en la silla, debe poder pasar 4 dedos entre la parte delantera de la silla y la parte trasera de las rodillas.
  • Altura del respaldo de la silla: el apoyo lumbar debe estar a la altura correcta.
  • Comportamiento dinámico del respaldo de la silla:
    – Fuerza de soporte: debe ajustarse en función del peso del usuario.
    – Tipo de basculación:
      • Contacto permanente: el respaldo de la silla debe seguir los movimientos de la espalda del usuario, pero el asiento debe permanecer fijo.
      • Asincróno: Todo el conjunto respaldo/asiento de la silla bascula hacia atrás. Recomendado para usos prolongados (> 7 h)

Piense en los trabajadores mayores

La comodidad y la ergonomía adquieren cada vez más importancia a medida que envejecemos: pérdida de flexibilidad, fatiga ocular, dolores articulares… Por ello, la edad media de los usuarios es un criterio importante en el momento de la elección.

Cifras

En 2014, el Instituto Fraunhofer de Ingeniería Industrial (IAO) midió el impacto resultante de un mejor apoyo de la espalda y de la posibilidad de que los usuarios se levantasen más fácilmente de forma regular. El resultado apuntó a un aumento del 20 % en el nivel de concentración.

(Fuente: Gert Zülch y Patricia Stock (editores): Auswirkungen der demo- graphischen Entwicklung in Montagesystemen, Universität Karlsruhe, Institut für Arbeitswissenschaft und Betriebsorganisation, 2009, pág. 12)

El recubrimiento

Existen tres criterios a tener en cuenta a la hora de elegir el recubrimiento:

  • Normas y limitaciones técnicas:
    – Clase de resistencia al fuego
    – Cumplimiento de las normas GS-CTBA y GS-FCBA (normas de calidad alemanas de robustez y seguridad, ampliamente utilizadas para mobiliario de taller)
    – Propiedades antiestáticas de la silla
  • Comodidad: la espuma es naturalmente más agradable que la madera.
  • Resistencia:
    – A la abrasión: según los movimientos y la vestimenta de los usuarios
    – A la agresividad de los elementos externos: agua, aceites, disolventes, ácidos…

Existen cuatro materiales principales:

  • Madera: resistente a grasas, aceites y disolventes. Fácil de cuidar y mantener.
  • Tela: cómodo y no inflamable.
  • Poliuretano: muy robusto y resistente a las agresiones químicas, golpes y cortes. Y muy fácil de cuidar y mantener.
  • Vinilo: un compromiso a tener en cuenta por su facilidad de lavado y su resistencia al fuego.

Una silla para cada actividad

A la hora de elegir la silla más adecuada para su actividad, debe tener en cuenta todos los criterios descritos anteriormente, así como los accesorios: reposabrazos, respaldo extraíble, compartimento para herramientas, etc.

Así limitará la tortícolis, los dolores de cabeza y otros males asociados a menudo con una mala postura sentada.

Y no se olvide de la garantía: si bien el período legal de una garantía es de 2 años, ¡algunas sillas cuentan con una garantía de 10 años! Esto se aplica a todos los productos de mobiliario de la marca Manutan.​

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